El tenis mundial hará escala en la región con el Rosario Challenger 2025. Se disputará del 2 al 9 de febrero en el Jockey Club de Rosario, ubicado estratégicamente cerca de Funes, un epicentro de actividad y crecimiento deportivo. Este torneo, de categoría ATP 125, promete consolidar a Rosario como uno de los puntos fuertes del tenis en el país, además de contar con la presencia estelar de Diego Schwartzman, quien hará allí su penúltima aparición antes de retirarse oficialmente.
El «Peque», cerca del adiós
Diego Schwartzman, ex número ocho del mundo, destacó en la conferencia de prensa que este será un momento especial en su carrera: “Es una oportunidad única jugar en un lugar tan especial como Rosario. Espero que los fanáticos puedan disfrutar tanto como yo lo haré”. A sus 32 años, el argentino se encuentra cerrando un ciclo lleno de logros, entre los que se incluyen cuatro títulos ATP y su histórica semifinal en Roland Garros en 2020.
Un torneo de peso internacional en la región
El evento no solo destaca por la categoría del torneo, sino también por su ubicación. El Jockey Club, situado en las afueras de Rosario y cerca de la ciudad de Funes, ofrece un entorno ideal para un torneo de este nivel. Gustavo Isaack, director de Torneos, resaltó: “No dudamos en traerlo a Rosario, una ciudad con una infraestructura y conectividad perfectas para un torneo de esta categoría”.
Rosario, epicentro del deporte argentino
El intendente Pablo Javkin celebró esta nueva apuesta deportiva: “Esto ratifica la calidad de nuestra ciudad para albergar eventos internacionales. En 2025 no solo tendremos este torneo, sino también los Juegos Argentinos de Alto Rendimiento, y en 2026, los Juegos Odesur, consolidando a Rosario como un destino clave para el deporte”.
Entradas y actividades
Las entradas para el evento ya están disponibles desde los $4.000 en www.turboentrada.com. Habrá una preventa exclusiva para socios del Jockey Club con descuento, y el evento incluirá atractivos adicionales como un patio gastronómico, un espacio comercial, y hasta una fiesta Bresh para cerrar.
