Franco Bartolacci, rector de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), asumió como vicepresidente del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) y planteó la necesidad de un cambio profundo en el sistema universitario. “La universidad no puede seguir haciendo lo mismo que antes”, afirmó en una entrevista con Rosario3, y llamó a debatir una política nacional de educación superior: “Hoy no hay plan, no hay idea, no hay un horizonte”.
El CIN reúne a las máximas autoridades de todas las universidades públicas del país. La presidencia quedó en manos de Oscar Alpa, rector de la Universidad Nacional de La Pampa, quien en 2026 le cederá el cargo a Bartolacci, según el esquema de rotación establecido.
UNR en el centro del debate
El rector rosarino destacó el valor simbólico de que Rosario y La Pampa estén al frente del organismo: “Es un reconocimiento al rol que tuvo la UNR en los debates del año pasado y a sus políticas institucionales”. También marcó como histórico que, por primera vez, la presidencia de la Federación Universitaria Argentina (FUA) y la conducción del CIN coincidan en representantes rosarinos.
“El sistema universitario necesita reformas y hay que estar dispuesto a dar los debates”, agregó. “Se trata de custodiar el derecho a estudiar para las generaciones actuales y futuras”.
Crisis presupuestaria y reclamos salariales
Consultado por la coyuntura, Bartolacci fue contundente: “La situación es más compleja que la del año pasado”. Mencionó el atraso presupuestario —funcionan con fondos reconducidos que perdieron el 30% de su valor—, los salarios docentes y no docentes muy por debajo de la inflación, y una paralización crítica del sistema científico. “La mitad de los sueldos están por debajo de la línea de pobreza”, lamentó.
Desde el CIN, insistirán con una ley de financiamiento universitario que preserve el presupuesto más allá del gobierno de turno. También alertó sobre las consecuencias de la falta de inversión: “Lo que se deja de invertir en ciencia hoy, lleva décadas recuperarlo”.
Obras detenidas y edificios históricos en riesgo
En todo el país hay 90 obras universitarias detenidas, financiadas por la Nación y la CAF. “El impacto no se ve ahora, pero será grave en el futuro”, advirtió Bartolacci. “La falta de mantenimiento y equipamiento se va a sentir, especialmente en edificios históricos que requieren inversión constante”.
El rector recordó que la UNR tiene múltiples sedes y muchas con valor patrimonial. “No se puede hacer magia, si no se invierte los problemas se agravan”.
Segunda reforma universitaria: un llamado al debate
Frente al escenario crítico, Bartolacci propuso algo más profundo: “Una segunda reforma universitaria para enfrentar nuevos desafíos”. Habló de modernización administrativa, revisión de planes de estudio y nuevas formas de enseñar. “En la UNR lo estamos haciendo con fuerza, pero hay que consolidarlo en todo el sistema público”, remarcó.
Y agregó: “Ojalá hubiera una convocatoria nacional para discutir una política de educación superior. Hoy no hay plan, no hay idea, no hay un horizonte”.
Ajustes internos y auditorías
Sobre el discurso de la “motosierra” y los controles, respondió: “Desde que asumí, reduje a la mitad los cargos de gestión. Solo se crearon cargos docentes para nuevas carreras. Administramos de forma responsable”.
Además, detalló que en los últimos cinco años la UNR presentó 98 informes de auditoría interna ante la Sindicatura General de la Nación (Sigen) y todos fueron aprobados. “Cumplimos todos los controles que exige la ley. Si quieren poner más, que los pongan”.
Más ingresantes y nuevas carreras
La matrícula de la UNR creció fuertemente: pasó de 21 mil ingresantes en 2023 a 31 mil en 2025. “El 80% del aumento se explica por las nuevas carreras”, indicó Bartolacci. También mencionó la migración desde universidades privadas por razones económicas y una revalorización social de la universidad pública.
En cuanto a estudiantes extranjeros, explicó que representan el 5% de la matrícula y que ese número se mantuvo estable. Sobre la posibilidad de arancelar sus estudios, dijo: “No hay ninguna propuesta concreta. Hoy la ley no lo permite y existen tratados internacionales que garantizan el acceso a la educación en igualdad de condiciones”.